La rifa del Avión Presidencial
Todo comenzó por la imagen de austeridad que deseaba dar Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, al decir que no usaría el avión ordenado por Felipe Calderón y estrenado por Peña Nieto. En teoría todo sonaba genial, sin embargo se encontraron con varias cosas extrañas.
AMLO dijo que pondría a la venta el Boeing 787-8 de super lujo, pero al parecer a nadie le interesó, por ello tuvo la idea de rifarlo, sin embargo resulta que tampoco podía rifarlo, así que tuvo la idea de hacer una rifa simbólica.
Comprabas tu boleto y las ganancias serían para comprar equipo médico para hospitales pero el precio del boleto era de 500 pesos, lo cual no era muy atractivo para el mexicano promedio de clase trabajadora. Por ello, el mismo gobierno compró boletos, así como funcionarios públicos de la 4T.
Se dice que se llegaron a vender casi el 70% de los boletos y la regla de que sí no salía un número ganador, el premio se iba al Instituto de Salud y Bienestar. La rifa se dio este pasado 15 de septiembre y el número del premio mayor no fue comprado.
Mil millones costó la rifa del avión presidencial, no fue tan mal, considerando que los premios sumaban 2 mil millones de pesos, matemáticas, hijo.
Mientras tanto, el avión que se niega utilizar AMLO, continúa estacionado en una base aérea militar de la Ciudad de México, en la espera de que algún magnate compré algo de segunda mano.
Fuente: France24, ElUniversal, El País