Gobernador de BC respalda al proveedor exhibido consumiendo “nieve”
Jaime Bonilla, gobernador de Baja California, realizó una transmisión en vivo en su página de Facebook el día de hoy (que por cierto no se encuentra disponible en su página y ¿La transparencia?) hablando sobre el asunto de Manuel García, director de Fisamex.
Ayer fue exhibido Manuel García, mismo que ha participado en las transmisiones en vivo con Bonilla, por medio de un video consumiendo presuntamente “perico” en varias y distintas ocasiones.
El gobernador reiteró que una cosa era la vida laboral y otra la vida personal, incluso que tienen un contrato con Fisamex el cual piensan respetar, así como que García tiene depresión por el escarnio público. Bonilla junto con el secretario estatal de salud, el doctor Pérez Rico, quien fuera exhibido en una boda con más de 100 personas sin cubrebocas, dijo que lo bueno es que el director de Fisamex quiere atenderse.
Pero contradictoriamente, Pérez Rico, presentó un examen de anti-doping presuntamente realizado a Manuel García y que dio negativo en coca, anfetaminas, metanfetaminas, marihuana y en opiáceos. No lo sé, Rick, yo no confiaría en el doctor que diagnosticó de bipolar al presidente municipal de Tijuana con tan nada más verlo en vídeo.
Nos queda claro que Bonilla respaldó a García, incluso PoderMx, asegura que el gobernador en la transmisión en vivo que ya no se encuentra disponible, dijo “ahora todos son la madre Teresa”, pésima comparación si consideramos que la madre Teresa estaba obsesionada con el sufrimiento y el dolor, así como recibir donativos de mafiosos.
De esta forma, la cuarta transformación de Baja California minimiza el escándalo, incluida con la participación de Vicenta Espinoza, secretaria de la Honestidad y Función Pública. El emperador del estado le atribuye el vídeo a los empresarios, por ello afirmó que: “ahora les vamos a subir 2 rayitas al cobro porque ya sabemos lo que les duele”.
Fisamex es la empresa contratada por el gobierno del estado, la cual provee el servicio de realizar auditorías al sector empresarial para detectar posibles consumos no registrados de agua y calcular cuanto consumieron para después cobrarles.
La empresa Fisamex se ha llevado 200 millones de pesos, que es el 20% de lo cobrado por el gobierno de Baja California encabezado por su majestad toda poderosa, Jaime Bonilla.