Mi “amigo” se quedó con mi firma de eventos y me borró de su historia

No soy un iniciado en organizar tocadas locales, hace mucho tiempo que no hago una pero hubo un período en que lo hacía con mucha frecuencia para promover a mis bandas, así surge mi idea de cambiar la firma de organización de evento de “vírgenes violadas s.a. de c.v.” a algo no tan blasfemo y presentable como formal.

Fue así como en parodia a una organizadora grande de eventos pop o música comercial en Mexicali llamada “SunSound” se me ocurrió en parodia el nombre de “LunaNoise”, en clara referencia a la noche y así como a los géneros estridentes marginados. Creé el logo, su cuenta de MySpace y toda la cosa, el concepto fue mío.

Corría el año de 2009, yo había fundado Maldad 13 en marzo de 2008, pero a finales de ese año, la primera alineación tuvo la salida del tecladista Peñuelas y del bajista Cyter, fue cuando en mi desesperación invité a Martín en el bajo.

Martín era mi amigo, había estudiado producción en CDMX, regresó con ganas de poner un estudio y lo hizo, era un buen músico pero le faltaba más oscuridad y rudeza, así como bajarle a la mota, se ponía a bailar de forma ridícula cuando tocaba conmigo, restándole seriedad a la banda.

Bueno, como buenos amigos, o al menos eso creía en ese entonces, organicé un evento yo solo, contacté a las bandas, el lugar, el equipo, hice los horarios, todo, Martín expuso algo de fotografías y puso un su amplificador de bajo.

Fue exposición de arte y música en vivo, nombré al evento “MatArte 1ro” y tuvimos varios invitados, trayendo a Menstruary de Tijuana, banda de mujeres fundada por las ex-Lenceria.

A este grado, no recuerdo cual fue la gota que derramó el vaso, pero fue algo que me dijo Martín por messenger de Hotmail lo que me colmó la paciencia, a esas alturas ya había hecho varias cosas gachas en mi contra.

Una de ellas fue vender mi bombo e indio de batería porque los dejé en su casa, cuando quise ir por ellos a los meses (porque no me dijo nada de “ven por ellos ya”) me dijo que los vendió. Ok, le estorbaban pero si le metí feria a esos dos tambores desde cero, los compré el Santo Tomás, tianguis en Calexico ya extinto, le compré piezas, cueros remo de aceita y todo para que fueran vendidos por alguien que vio negocio en cosas ajenas, eso no se hace sin advertencia.

Lo dejé pasar porque quedamos bien ya que me compensó con la venta de un pedal de distorsión, le bajó bastante el precio y también grabó a mi banda anterior sin costo alguno.

Despué de hacer el primer evento de LunaNoise, teniendo buen éxito, sacando dinero para la banda de fuera y realizar un after; pues ya quería armar otras tocadas, pero resulta que Martín quería rentarme el sonido, es decir, él tenía equipo, eramos socios, pero quería cobrarme por el equipo de backline del evento, incluso llegó un momento en que quería que ensayaramos en su casa para cobrarnos la luz.

Fue la suma de varias cosas mi hartazgo, el acabose fue cierta tontería que me dijo en messenger y decidí sacarlo de Maldad 13, le dije que se quedara con la firma de LunaNoise, el MySpace y el concepto, eso fue a finales del verano de 2009.

Invité en ese entonces a Nestor, un vecino y guitarrista, para que fuera bajista provicional o algo así, en lo que encontrabamos un bajista oficial.

Ese otoño de 2009, cuando por fin teníamos agendadas varias presentaciones, el baterista empezó a faltar a los ensayos, no contestarme el teléfono y lo peor fue que se hizo el enfermo para cancelar un evento; esto lo sé porque me dijeron que lo vieron con su novia paseando la noche en que teníamos una tocada. Fue cuando lo saqué y le dí las gracias por tocar conmigo, pese a sus mentiras y falsedades.

En ese entonces estaba en un estudio grabando el disco debut de Maldad 13, después de meditarlo invité de regreso a Cyter, el primer bajista de la banda, puso sus condiciones y las acepté gustoso. Nos dimos a la tarea de buscar un baterista e invitamos a Suzeh, duramos buen rato tocando juntos y muy a gusto, luego volvería a cambiar la alineación pero eso no es de lo que quiero hablar.

Terminé mal con Martín, se acabó esa amistad, lo conocía desde la secundaria, siempre fue imperactivo y un poco impertinente pero desde que comenzó a fumar mota, a viajar a Real de Catorce y hasta meterse hongos, era un Martín muy pacheco, muy hippie, muy “con la naturaleza” y esas ondas. Ahora creo que da clases de música o algo así, a menores, nombre, el profe dealer (broma).

El punto está en su momento di con Luna Noise en Facebook, pero no me importó, y hace unos días di con ese perfil otra vez y bueno, me despertó varios recuerdos pero mi molestia es que me borrara de la historia oficial de una organización que Martín dejó morir, no debería importarme, lo sé, pero era un buen nombre Luna Noise.

En el perfil dice textualmente: “LunaNoise (eventos culturales) nace como inquietud de Martin V*** K*** cabeza de esta organización no lucrativa, previamente asociándose Fernando C***** para apoyar al arte de los alrededores. Aquellos que son ignorados o tienen algo relevante que ofrecer, en varias disciplinas artísticas, desde música, pintura, fotografía, cine, poesía” ¿No lucrativa? Si quería sacarnos feria a las bandas en las que tocaba.

Como pueden ver, me borró de su “historia oficial” cuando él no hizo nada en el evento debut de LunaNoise, pero eso sí, presume en su curriculum haber tocado conmigo, pues agrega: “Realizamos logísticas para conciertos y eventos culturales, diseñadas por el productor musical Martin V*** K*** (Humanidad Negativa, Orquestra CEART, LSD, Rondalla del Cetys, Patada Roja, Mister X, Maldad 13, D’Vintage, Monociclo, Indigo, Raúl Díaz, así como proyecto solista”.

Cambió el logo por otro y creo que hizo un par de eventos enfocado más en el folk experimental y hasta uno de techno, pero me llamó la atención las indirectas que puso en el perfil como de Fiona Luchona.

Publicó en dicho perfil “El arte es conciencia, no resistencia!”, en el 2008 en una guerra de bandas grité al final de nuestra participación “¡El arte es resistencia!”, un eslongan de Nine Inch Nails en aquellos tiempos.

Recuerdo que Martín hablaba mucho de “crear conciencia”, pero curiosamente, la resistencia implica estar conciente y actuar, la resistencia es resistirte a las tendencias dominantes o simplemente hacer protesta con el arte, la conciencia no sirve de nada si no actuas; creo que es evidente que puso eso por mi.

Pero al mes de publicar ese post, puso el siguiente estado, donde es claro que la pedrada era para mi: “El quejarte, ya sea de calor, de alguna persona, entidad, gobierno, solo demuestra que tan patético eres! Vete en un espejo y autocriticate para evolucionar y mejorar. No hay que criticar, hay que actuar!”.

Bueno, eso me suena a “si no votas, cállate”, pero curiosamente mis canciones hablaban de eso, crítica social, una catarsis para gritar y no dejar nada adentro, ya sea del gobierno, la religión, personas que me hicieron algún daño y otras hasta de parodia o historias de horror.

Pero bueno, creo que a Martín le moví el cerebro y eso de “no hay que criticar, hay que actuar”, pues hubiera actuado creando un nombre nuevo en vez de quedarse con todo sin darme crédito alguno de la creación de Luna Noise, eso hubiera sido lo más conciente y decente. La última publicación que hizo en el perfil de Luna Noise fue el 23 de enero de 2011 y fueron fotos de un evento, madres, hace 12 años.

Pasó tanto tiempo y no lo he vuelto a ver, supe que en otro proyecto quiso rentarle el equipo a su propia banda, cobrarle la luz, lo mismo que nos quiso aplicar, por ello ganó mala fama entre músicos de la escena local.

Al final de todo, le agradezco lo que aprendí: no confíes en nadie o no hagas negocios con amigos mercantilistas que quieren sacar dinero a sus propios compañeros de banda.

Donde quiera que estes Martín, espero que hayas visto la luz, que estes en paz contigo mismo, que en vez de usar y abusar de la gente convivas con ella, des amor y lo recibas también, te deseo lo mejor, no hay rencor, todo quedó en el pasado.