Bonilla sigue golpeteando a Hank y lo culpa de asesinato a periodista
Jaime Bonilla, gobernador de Baja California, sigue violando la constitución de los estados unidos mexicanos que dice que el gobierno solamente deberá emitir mensajes para difundir programas y avances, no para emitir juicios sobre adversarios políticos y está ocasión se va con todo en contra de Hank Rhon.
En su transmisión diaria en Facebook, donde sus “bots” de Morena hacen preguntas a modo, le preguntaron sobre el curso de “masculinidad positiva” que tomó el ingeniero Jorge Hank Rhon, candidato a la gubernatura de Baja California por el PES (partido encuentro solidario).
Como niño berrinchudo por los señalamientos de machista y misógino al descalificar y dudar de la capacidad de Lupita Jones por ser una mujer bella, Bonilla intenta desviar nuestra atención a Hank Rhon acusándolo a él de machista por una mala interpretación de su declaración.
Anteriormente el gobernador pasó un corto fragmento de la rueda de prensa de Hank con el PES hace unas semanas, donde dijo que las mujeres son ahora menos inteligentes. De forma dolosa, Bonilla tomó ese pedacito y omitió cuando dice Hank que las mujeres son mejores que los hombres en muchas profesiones.
Ahora Bonilla, lo primero que hace es burlarse de su sobrepeso diciendo “no se si aguante mucho la silla”, quedando como un pelmazo que critica a la gente por su físico, y se le va a la yugular diciendo: “Que bueno que tiene la intención… hay que mandarlo a capacitación de no matar, de no engañar… y no se nos olvida a todos los que somos de aquí el asesinato del “Gato” (se refiera a Héctor “el gato” Félix, periodista del semanario Zeta)… tonto es el que cree que engaña al pueblo”.
La verdad es que Jaime Bonilla no tiene calidad moral ni legal para hacer dichas declaraciones, en primera al violar la constitución mexicana al poner el espacio gubernamental para golpetear a una figura política. En segunda, porque acusa de asesinato de un periodista cuando el propio Bonilla tiene varias leyendas negras en su contra, muchas de ellas están documentadas.
En los 80’s, su infame soborno en el baseball constándole a Bonilla un veto y ahora siendo gobernador, su altercado con el semanario Zeta al acusarlo de mentiroso, sin mencionar cuando su secretario de gobierno, Amador Rodríguez Lozano, indicó que Adela Navarro, editora del Zeta, tuvo una relación amorosa con cierto empresario, intentando manchar la reputación de la periodista.
Jaime Bonilla, antes de hablar debe de poner orden en su administración golpista y corrupta, porque solamente se muerde la lengua al hablar de los rivales políticos.